Los biomateriales son materiales que provienen directamente de la naturaleza y son biodegradables.
Pueden derivar de organismos vivos, de rocas, minerales o fibras vegetales y ser extraídos directamente de la naturaleza o requerir algún proceso de fabricación.
Son materiales sostenibles, en muchos casos renovables y además aseguran un mínimo impacto sobre la salud de las personas y del medioambiente. Si además son de procedencia local, tendrán un reducido o nulo impacto de carbono añadido.
Ejemplos de biomateriales son la madera y sus derivados (corcho, fibras de madera, celulosa), las fibras vegetales (cáñamo, lino, algodón, paja, pinturas vegetales), la tierra (tapial, bloques de tierra comprimida BTC), la arcilla (ladrillos cerámicos o adobe), la piedra (natural, conformada como el porcelánico o el terrazo, reciclada como la grava proveniente de residuos de la construcción, o calcinada como cal).
Nada nuevo. Son materiales que llevan miles de años usándose en la construcción y que habían sido relegados por el auge de los materiales industrializados y de elevado impacto ambiental como el acero , el hormigón o el plástico.
En la actualidad el sector de la construcción representa alrededor del 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial. Estas emisiones se refieren no sólo al uso de energía de los edificios, sino también a las derivadas de los procesos de extracción, producción y puesta en obra de los materiales.
La nueva regulación de eficiencia energética de edificios de la UE contempla por primera vez la obligatoriedad del cómputo de emisiones en la construcción de nuevos edificios como primer paso hacia su regulación y limitación, ya vigente en algunos países.
Hoy en día, proyectar, remodelar y construir nuevos edificios debe significar desarrollar estrategias de diseño orientadas al bienestar humano y ambiental, comenzando por elegir los mejores materiales.
De este modo, el diseño con biomateriales es la respuesta a muchos de los retos de salud y medioambientales del sector de la construcción. El uso de estos materiales y de las técnicas constructivas asociadas facilitan además una construcción en armonía con el entorno y la generación de espacios saludables con óptimas capacidades de confort y grandes posibilidades estéticas.
